En mi casa, “lo mio”, lo que me sucede es un secreto a voces y a la vez un tema tabú. Nadie quiere hablar de nada yo inclusive. Incluso yo misma tengo épocas. Hay épocas en que me autoengaño y me convenzo a mi misma de que estoy perfectamente. Hay otras que no, pero eso solo me lo reconozco a mí misma, bueno y a la psicóloga si me siento realmente mal. De todas formas estar mal me encanta. Cuándo te acostumbras al dolor es difícil desprenderte de él, hay algo en él que te engancha.
Al principio, cuando empecé a perder peso mi madre se escandalizó ¿exageradamente? Bueno eso es discutible. Ahora mi madre ya está más que acostumbrada a mis excentricidades para con la comida y se conforma con que coma algo, lo que sea. A veces, cuando se le ocurre insistir más de la cuenta, acabamos discutiendo y yo acabo haciendo lo que me viene bien igualmente así que debe pensar que no le sale muy a cuenta. No debo ser la única que se comporta así, pero es algo que me llama la atención, es curioso. Como más me insisten en comer menos como, y más me reafirmo en mi comportamiento.
El otro día me pegué una comilona que acabé vomitando. Antes nunca vomitaba, o los procuraba muy fervientemente, si había alguien en casa. Ahora eso ya no me importa. Subo una bolsa de plástico en mi habitación y una botella de agua. Coloco la bolsa dentro de mi papelera que siempre está vacía y la papelera encima de mi cama, por último pongo música y no demasiado alta. Así voy haciendo. Odio vomitar. Es una de las cosas que menos soporto en este mundo. Lo que no sé es si lo odio por el hecho en sí, es decir, por tener que verme postrada en el retrete o donde sea e introducir mis dedos hasta el fondo de la garganta, por las llagas, y la boca extraña: me deja una sensación muy desagradable como si me hubieran limado toda la boca y la garganta con una lija de esas de carpintería y el sabor…ese sabor ácido de los líquidos gástricos. Cuesta describir esta sensación tan desagradable. Bueno, el caso es que no sé si lo odio por eso o por el hecho más psicológico, el hecho de haber transgredido la norma, el echo de haber comido. El vómito es a la vez mi castigo y mi redención. Me rescata de la obesidad mórbida aunque nunca lo vomitas todo y eso es un punto que hay que tener muy en cuenta. Antes usaba laxantes pero ahora intento no hacerlo porque noto que no es bueno para mi estómago. Lo estoy notando desde hace tiempo. Hay días que se me hincha la barriga y oigo a mis intestinos temblar y es un calvario, se me pone la piel de gallina y empiezo a tener más frío de lo habitual, pero eso ahora no viene al caso.
Bueno a mi favor he de decir que después de la mencionada comilona lo voy llevando bien y me he escaqueado de muchas comidas, sólo como cuando está mi madre. Qué llegue el martes y con él mi tan anhelada soledad en las horas de comer!
Al principio, cuando empecé a perder peso mi madre se escandalizó ¿exageradamente? Bueno eso es discutible. Ahora mi madre ya está más que acostumbrada a mis excentricidades para con la comida y se conforma con que coma algo, lo que sea. A veces, cuando se le ocurre insistir más de la cuenta, acabamos discutiendo y yo acabo haciendo lo que me viene bien igualmente así que debe pensar que no le sale muy a cuenta. No debo ser la única que se comporta así, pero es algo que me llama la atención, es curioso. Como más me insisten en comer menos como, y más me reafirmo en mi comportamiento.
El otro día me pegué una comilona que acabé vomitando. Antes nunca vomitaba, o los procuraba muy fervientemente, si había alguien en casa. Ahora eso ya no me importa. Subo una bolsa de plástico en mi habitación y una botella de agua. Coloco la bolsa dentro de mi papelera que siempre está vacía y la papelera encima de mi cama, por último pongo música y no demasiado alta. Así voy haciendo. Odio vomitar. Es una de las cosas que menos soporto en este mundo. Lo que no sé es si lo odio por el hecho en sí, es decir, por tener que verme postrada en el retrete o donde sea e introducir mis dedos hasta el fondo de la garganta, por las llagas, y la boca extraña: me deja una sensación muy desagradable como si me hubieran limado toda la boca y la garganta con una lija de esas de carpintería y el sabor…ese sabor ácido de los líquidos gástricos. Cuesta describir esta sensación tan desagradable. Bueno, el caso es que no sé si lo odio por eso o por el hecho más psicológico, el hecho de haber transgredido la norma, el echo de haber comido. El vómito es a la vez mi castigo y mi redención. Me rescata de la obesidad mórbida aunque nunca lo vomitas todo y eso es un punto que hay que tener muy en cuenta. Antes usaba laxantes pero ahora intento no hacerlo porque noto que no es bueno para mi estómago. Lo estoy notando desde hace tiempo. Hay días que se me hincha la barriga y oigo a mis intestinos temblar y es un calvario, se me pone la piel de gallina y empiezo a tener más frío de lo habitual, pero eso ahora no viene al caso.
Bueno a mi favor he de decir que después de la mencionada comilona lo voy llevando bien y me he escaqueado de muchas comidas, sólo como cuando está mi madre. Qué llegue el martes y con él mi tan anhelada soledad en las horas de comer!
5 comentarios:
oLa waPa!! m a gutao muxo tu bLog y t e agregao a mis linKs, ok? si t parce mal dimelo y t borro.. pro d tos mdos m segire pasand pa ver q tl vas!
muXos besitoSs pRinceSs y ANIMO!!
Hola princessa!!
Adoro tu blog llebo unos dias leyendote.. y apsandome por mas blogs deanas y mias... soy nueva en esto.. bueno realmente mi blog es de dos personas diana(mia) y yo angela (ana)..
Nos sentimos un poko solas.. asta estando juntas..
Si te apetece pasate yome seguire pasando!
Por cierto yo tmb odio bomitr, pero odio asm cuando como cn al esperanza debomitr despues y no soy capaz de acerlo ... (no se q me pasa q no me sale nada de la grganta) Puedo preguntr como lo aces??' algun truko en especial??
Bueno lo dixo!
Besitos princesa!! y muxo animo!!
Me gusta mucho la manera en la que escribes, redactas muy bien.
Yo no vomito, nunca lo he hecho, el tan solo pensarlo me da miedo.
Espero estes bien.
hola!!!
Me dijiste que me pasara y no lo he dudado un minuto, me ha gustado mucho tu blog, y la menera en la que escribes.
Cuando he leido lo de tu madre, me he acordado de la mía, en todos los comentarios que me suelta, en que aunq coma poco xa ella nunca es lo suficientemente poco...
yo ya no sé si la culpa de este "complejo" la tendría ella, o es mía...
Bueno niña, un beso muy grande! espero pronto tu proxima entrada al blog!
cuidate!
hola nenaa!!
gracias por postear mi blog, te voy a agregar para verte seguido
y pff mi vida es un atracón, soy un desastre, me odio
besoss
liss
Publicar un comentario